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El damero y sus bordes: la Lima que queda afuera

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La fundación de Lima en 1535 vino acompañada de una herramienta muy clara de control urbano: el damero. Esa grilla impuesta desde la lógica del poder español buscaba ordenar el territorio, organizar la ciudad y, sobre todo, marcar jerarquías. En el centro, la Plaza Mayor, y desde ahí, manzanas perfectas que iban perdiendo importancia a medida que se alejaban del núcleo. Sin embargo el damero no sólo organizaba el espacio físico, sino también las relaciones sociales. Lo que no entraba en esa grilla quedaba literalmente afuera.

Del otro lado del río Rímac, más allá de la última manzana trazada, empezaba otra ciudad: la no planificada, la no representada, la que no seguía la lógica del orden colonial. Era el espacio de los “otros”: indígenas, mestizos, afrodescendientes, trabajadores, sectores que no tenían lugar dentro del damero y que, como dice Ramón Gutiérrez, “se vieron obligados a ocupar los márgenes, construyendo ciudad en los intersticios del sistema oficial”. Esa forma de habitar era más espontánea, adaptada al terreno y a las necesidades, pero completamente ausente en los planos.

El damero entonces funcionaba como una herramienta de inclusión y exclusión. Nicolini lo explica bien cuando dice que “el trazado reticular no es inocente: define centralidades, margina periferias y establece un modelo de ciudad ideal que nunca incluye a todos”. Esa idea de ciudad perfecta, ordenada y jerárquica contrasta fuertemente con la Lima real, vivida en sus bordes, donde no llegaba el poder ni la monumentalidad.

Incluso el río, que podría haber sido un elemento natural de integración, se convierte en límite. Una especie de frontera invisible pero muy concreta. Del otro lado del damero, cruzando el Rímac, está lo no pensado por el modelo colonial, lo que quedó fuera de la representación. Y sin embargo, como dice Gutiérrez, “la ciudad se completaba con esos espacios marginales, que garantizaban su funcionamiento social y económico”. Es decir: lo que no se veía, sostenía a lo que sí.

¿QUIENES SOMOS?

Somos el grupo 8 de HISTORIA 2, cátedra ABOY, integrado por Felipe Borda, Martina De Lorenzo, Martina Gonzalez Verdi, Maximo Maristany, Teo Lombardo.

En este sitio web desarrollaremos y compartiremos nuestros aprendizajes incorporados en la cátedra y serán reflejados en nuestros análisis.

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